Lucas González hace historia y lleva al Tolima a la final

A sus 42 años, Lucas González consigue su primera final como técnico, un resultado que no sólo silencia críticas implacables, sino que también ratifica que ser diferente suele generar resistencia y rechazo. Ser distinto casi siempre significa recorrer un camino más largo y difícil, pero cuando se cree con convicción y se mantiene la fidelidad a una filosofía, los frutos llegan.

Formación y convicción: el ADN de Lucas González

Desde muy joven, a los 20 años, se fue a estudiar al exterior y desde entonces no ha parado de prepararse.

•  Licenciatura en Ciencias del Deporte – ACU (Australia), 2006
• Licencia de Preparador Físico – AFC/FFA (Australia), 2013
• Curso Coaches Academy – FCB (Barcelona), 2016
• Máster de Entrenadores de Fútbol – RFEF (España), 2017
• Entrenador Nacional de Fútbol – RFEF (España), 2020
• Máster Profesional en Fútbol – FCB, Barça Innovation Hub (Barcelona), 2019

Se convirtió en un entrenador obsesionado por el detalle, con el método y la cátedra. El que no cree en el azar y el que se prepara para tantos escenarios y probabilidades en el juego como es posible. El entrenador que cree que en los libros, está el éxito de su equipo, y no en qué tan buen manejo de grupo tiene. Con este sello comenzó su carrera en el banquillo de Águilas Doradas en 2023, consiguió un buen rendimiento en el todos contra todos y uno flojo en el cuadrangular. Luego en América volvió a repetir clasificación dentro de los ocho, pero el conjunto escarlata se desplomó y no logró la final, aunque sí, un cupo a Copa Sudamericana, que para la dirigencia escarlata no fue suficiente y decidieron relevarlo del cargo. De su pasó por Central Córdoba en Argentina, no hay mucho que decir más allá que dirigió nueve partidos y no ganó ninguno.

El Tolima de González: solidez, identidad y madurez

Cuando regresó a Colombia no encontró muchas puertas abiertas, bueno tampoco tenía muchos resultados que lo respaldaran. Pero con paciencia y manteniéndose fiel a su esencia, la oportunidad volvió. En junio de 2025, Tolima le dio la bienvenida. Un club que hoy goza de reconocimiento por su gestión administrativa, deportiva y humana. Lo del Tolima no es casualidad: no cualquiera es el segundo equipo con más clasificaciones a cuadrangulares (34), solo detrás de Atlético Nacional (37), desde que existen los torneos cortos.

La instrucción para Lucas como nuevo timonel del pijao fue clara: un proyecto sostenible y competitivo que priorizara identidad, juego colectivo y crecimiento con la plantilla actual. Y lo ha conseguido con honores. El equipo dejó de ser solo un equipo para volverse una tribu; dejó de jugar en el Manuel Murillo Toro para recibir a sus visitantes en “la hoguera del indio”. Bajo el liderazgo de González, Tolima se convirtió en una bóveda casi impenetrable: qué cosa tan difícil es hacerle un gol al conjunto de Ibagué. En el todos contra todos, junto a Santa Fe, fue uno de los equipos que menos goles recibió (17 en total), y en los cuadrangulares su arco solo cayó una vez. Su juego se caracteriza por la posesión y una defensa muy sólida, con los centrales Marlon Torres y Anderson Angulo como jefes de línea.

Pareciera que el técnico bogotano encontró su lugar. Demuestra que sigue siendo ese estratega metódico y moderno, influenciado por su formación internacional, pero ahora con una experiencia que ya supo poner en acción con la madurez de quién ya sabe qué funciona y qué debe abandonar. De sus equipos que antes eran altamente criticados porque “los llenaban de goles”, hoy su Tolima finalista prueba solidez defensiva, sin sacrificar trabajo colectivo, una de las grandes claves del semestre.

De aquel técnico al que llamaron “sobrado” o “en desarrollo”, más reconocido por sus ideas que por sus resultados, hoy queda poco. Ahora es el entrenador que unió a toda una región: jugadores, staff, cuerpo técnico e hinchas. El que sigue sorprendiendo con sus ideas: hace seis meses se reunió con la prensa en Ibagué para que lo conocieran, entendieran su metodología y comprendieran cómo quería que jugara este Tolima. Definitivamente Lucas González tiene detalles que enamoran, elementos que complementan su filosofía y que hoy tienen al vinotinto y oro peleando por su cuarta estrella.

Lucas González en Deportes Tolima hoy: liderazgo, región y final

Deportes Tolima hace tiempo dejó de ser el “Tolimita”. Hoy es una institución respetada, coherente y competitiva. El gran desafío ahora es sostener ese nivel en la final y no traicionarse cuando el título está en juego. Lucas González ya dio el primer paso más importante: creer, resistir y llegar. El último, el más difícil, está por jugarse.

Lucas González se consolida como una de las piezas más influyentes de Deportes Tolima en la temporada 2024/2025, aportando equilibrio y liderazgo a sus 44 años, con un Elo de 84 que respalda su rendimiento. Su protagonismo en la construcción es evidente, con 477.39 pases intentados por partido y un 86.12 % de precisión, además de una alta incidencia ofensiva gracias a sus pases progresivos (74.17), envíos al último tercio (58.61) y pases al área (21.44).

En fase ofensiva también suma llegada, registrando 13.11 tiros, 1.25 xG y 1.33 goles por encuentro. Defensivamente, González mantiene un aporte constante con 75.06 recuperaciones, 34.39 intercepciones, 51.5 duelos defensivos y una presión sostenida que limita al rival a solo 0.84 xG en contra y 3.33 tiros a puerta recibidos, confirmando su rol clave en ambos lados del campo pese a un volumen elevado de pérdidas (98.44), propio de su alta participación en el juego.

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