El Mundial de Catar coronó a Leo Messi y a una Selección Argentina superior en el global del campeonato y con el puntito de suerte necesario para los campeones. Entre los hombres más exitosos del Mundial encontramos a jugadores como Messi, Modric, Mbappé, el Dibu Martínez o Bono, pero también es momento de buscar aquellos jugadores que no estuvieron a la altura en la cita mundialista.
Estos son algunos de los jugadores que no estuvieron a la altura en la cita celebrada entre noviembre y diciembre en el país asiático, primera edición disputada en el invierno del hemisferio norte.
Christian Eriksen: Dinamarca no alcanzó ni los octavos
La Selección de Dinamarca fue, por su buen rendimiento en el presente siglo en los torneos en los que había participado, una de las decepciones del Mundial. Los del norte de Europa no fueron capaces de clasificarse tras Francia en el Grupo D y fueron eliminados a las primeras de cambio de Mundial.
Después de una Eurocopa que difícilmente olvidará por el problema médico que estuvo a punto de acabar con su vida, Christian Eriksen regresaba a una gran cita y lo hacía de nuevo en un grande como el Manchester United y con un gran rendimiento. Sin embargo, en Catar no estuvo a la altura de las expectativas.
El futbolista nacido en Middelfart jugo los tres partidos y en todos ellos disputó los 90 minutos y ni fue capaz de marcar ni tampoco asistió a ninguno de sus compañeros. El único resultado positivo de Dinamarca fue el empate a cero inicial ante Túnez, un choque en el que se esperaba más de los de Hjulmand, ya que los daneses cayeron tanto contra Francia (2-1) como ante Australia (1-0).
Ferran Torres: dos goles, pero se esperaba más
España cayó en octavos de final de un Mundial en el que los de Luis Enrique fueron claramente de más a menos. El inspirador 7-0 ante Costa Rica de la jornada inaugural se difuminó con el 1-1 contra Alemania y la derrota frente a Japón en la última jornada de la fase de grupos. Por suerte, el 7-0 metió a ‘la Roja’ en las eliminatorias por la diferencia de goles, pero España cayó a las primeras de cambio.
Criticado por el arranque de campaña en su club, el azulgrana Ferran Torres arrancó la Copa del Mundo con un doblete ante los ‘ticos’, pero esa fue su única aportación en el Mundial, ya que se fue de vacío tanto contra Alemania como frente a Japón y Marruecos.
El de Foios disputó un total de 219 minutos en Catar, repartidos del siguiente modo: 57’ contra Costa Rica, 54’ ante Alemania, 33 frente a Japón y 75 contra Marruecos y su única aportación ofensiva fueron los dos goles, uno de penalti, del debut.
Thomas Müller: de vacío en una de sus competiciones favoritas
Alemania fue una de las selecciones más decepcionantes en Catar. Los dirigidos por Flick no fueron capaces de alcanzar los octavos de final en un grupo que contenía a España, Japón y Costa Rica. Al final, la derrota frente a los nipones pesó demasiado y los germanos no lograron los goles suficientes para apartar a ‘la Roja’ en la última jornada de las eliminatorias.
Se esperaba mucho más de un nutrido grupo de futbolistas alemanes, pero uno de ellos decepcionó algo más que lo demás y no fue otro que Thomas Müller. Goleador con especial idilio con la competición, se fue de vacío y no aportó nada para el juego de ataque germano.
En total, el atacante del Bayern de Múnich, que dejó la puerta abierta a una retirada de la Selección, jugó 203 minutos y ni marcó ni fue capaz de dar una asistencia en una competición en la que había logrado cinco goles en Sudáfrica y de nuevo cinco en Brasil.
Kevin De Bruyne: Bélgica cuajó un torneo pésimo
Quizás sea algo duro personificar la decepción de la Selección Belga en Kevin de Bruyne, pero lo cierto es que el futbolista del Manchester City, al igual que otros compañeros como Hazard, Carrasco o Lukaku, no estuvo acertado en Catar.
Bélgica afrontará ahora un cambio de ciclo necesario por la veteranía de sus principales piezas y De Bruyne se quedó con las ganas de brillar en una cita a la que llegaba con 31 años y que podría haber sido la última de su carrera.
El jugador de los ‘Diablos Rojos’ disputó los 90 minutos en todos y cada uno de los partidos jugados por Bélgica en la cita mundialista y no fue capaz de marcar ni asistir. Bélgica se impuso por la mínima a Canadá y luego perdió contra todo pronóstico frente a Marruecos. Un triunfo ante Croacia hubiera metido al país centroeuropeo en los octavos de final, pero los de Roberto Martínez no fueron capaces de marcar.
Cristiano Ronaldo: de indispensable a suplente
Hablar de decepción en la trayectoria de Portugal en el Mundial quizás pueda ser algo exagerado. Pero lo cierto es que Cristiano Ronaldo, cuando parecía que tenía en sus manos luchar por el premio gordo, terminó incluso apartado del once por su técnico Fernando Santos.
La suplencia del astro de Madeira tanto en octavos de final como en cuartos de final fue una de las grandes noticias de la cita y Cristiano Ronaldo no pudo ir más allá del gol de penalti ante Ghana en la jornada inaugural que le permitió convertirse en el único jugador en marcar en cinco Mundiales distintos.
Ni pudo atrapar a Eusebio como máximo goleador histórico en una Copa del Mundo para su país ni tan siquiera fue capaz de volver a marcar o asistir en el campeonato. En total, 290 minutos de juego con un único tanto de penalti y repartidos del siguiente modo: 88’ contra Ghana, 82’ ante Uruguay, 65’ frente a Corea del Sur, 16’ contra Suiza y 39’ ante Marruecos.
Luis Suárez: a cero en su última gran cita
Acostumbrada a reaccionar para alcanzar las rondas finales a última hora en el siglo XXI, Uruguay se quedó sin eliminatorias en este 2022 después de un flojísimo inicio en el Mundial de Catar. La ‘Celeste’ empezó con un 0-0 insulso ante Corea del Sur y luego cayó ante Portugal con un 2-0 que obligada al país sudamericano a esperar otros resultados en la última cita.
Tras un pésimo debut en Catar, Luis Suárez fue suplente ante Portugal y regresó contra Ghana al once. El delantero centro se despidió de la cita con una asistencia en esa última jornada, aunque con las lágrimas por la eliminación y por no conseguir un tanto que le hubiera convertido en máximo goleador histórico de Uruguay en los Mundiales.
En total, el de Salto jugó 149 minutos en Catar, repartidos del siguiente modo: 64’ contra Corea del Sur, 18’ ante Portugal y 66’ frente a Ghana. La ya reseñada asistencia fue su único botín.