Las 5 finales de Copa Libertadores más míticas de la historia
Comunicador y periodista con gran pasión por los deportes y el análisis de la realidad nacional e internacional.
La Copa Libertadores de América, creada en 1960, ha dejado una rica historia de finales vibrantes, marcadas por remontadas heroicas, rivalidades históricas y momentos imborrables. Clubes de Brasil, Argentina, Colombia, Uruguay, Chile o Paraguay han regalado al universo fútbol imágenes ya imborrables en el imaginario colectivo.
A continuación presentamos un ‘top 5’ de las finales más épicas del torneo. Encuentros que vamos a desgranar por su contexto, el desarrollo de los partidos, los hechos clave y el legado que dejaron en el fútbol sudamericano.
1. River Plate vs. Boca Juniors (2018) – La Final del Siglo en Madrid
La final de la Copa Libertadores 2018 entre River Plate y Boca Juniors, conocida como ‘La Final del Siglo’, fue la primera en la historia en enfrentar a los dos gigantes del fútbol argentino en una definición continental. El partido de ida se jugó en La Bombonera y terminó 2-2, con goles de Ábila y Benedetto para Boca, y Pratto más un autogol de Izquierdoz para River. La vuelta, que debía jugarse en el Monumental, fue suspendida tras un ataque al bus de Boca y, en una decisión inédita, CONMEBOL trasladó la final al Estadio Santiago Bernabéu de Madrid. El gran templo blanco acogió este gran duelo el 9 de diciembre ante la mirada del mundo.
En España, Boca se adelantó con otro tanto de Benedetto antes del descanso, pero River reaccionó con goles de Pratto, golazo a la escuadra de Quintero y Pity Martínez para sellar el 3-1 en la prórroga. El triunfo le dio a River su cuarto título continental y una consagración histórica frente a su eterno rival. La final, cargada de tensión, polémica y dramatismo, fue también la última disputada a doble partido, ya que desde 2019 la Libertadores se juega a partido único.
Más allá del resultado, esta final marcó un antes y un después en la historia del torneo por su simbolismo, el cambio de formato y el impacto global que tuvo. La carrera final de Martínez hacia el gol vacío y la postal del colombiano Juanfer Quintero como héroe dejaron imágenes imborrables para el recuerdo de los hinchas.
Mientras repasamos estas finales históricas, muchos aficionados buscan formas de acercarse aún más a la emoción del fútbol. Desde seguir estadísticas hasta explorar nuevas maneras de involucrarse con cada partido, incluso hay guías que enseñan cómo empezar a apostar en línea con Codere, combinando entretenimiento y aprendizaje sobre el juego.
2. Peñarol vs. River Plate (1966) – La Hazaña de Santiago
La final de la Copa Libertadores de 1966 entre Peñarol y River Plate es una de las más memorables de la historia del torneo. Tras victorias locales, 2-0 para Peñarol en Montevideo y 3-2 para River en Buenos Aires, la serie se definió en un desempate en Santiago de Chile, el 20 de mayo. Allí, River parecía tener la gloria al alcance con un 2-0 parcial al descanso gracias a los goles de Onega y Solari. Pero se produjo una de las grandes remontadas de la historia de la Libertadores, la conocida como ‘Hazaña de Santiago’.
El segundo tiempo cambió todo: Spencer recortó y Abbadie empató para Peñarol, forzando el alargue. En la prórroga, Spencer volvió a marcar y Rocha selló el 4-2 definitivo, consagrando a los uruguayos como campeones por tercera vez.
La remontada fue tan inesperada como histórica. Peñarol dio una lección de garra, mientras que River se derrumbó. Se dice que la actitud relajada del arquero Carrizo encendió el orgullo aurinegro. El otro resultado de esta derrota es que nació el apodo ‘gallina’ para River debido a su supuesto poco carácter.
Para Peñarol, el título fue el paso previo a conquistar el mundo: los ‘carboneros’ vencieron al Real Madrid en la Intercontinental de ese mismo año. En cambio, River tuvo que esperar hasta 1986 para levantar por primera vez la Libertadores. La ‘Hazaña de Santiago’ se convirtió en la gran remontada de las finales.
3. Atlético Nacional vs. Olimpia (1989) – El primer grito colombiano
La final de la Copa Libertadores de 1989 entre Atlético Nacional y Olimpia marcó un antes y un después en la historia del fútbol colombiano. El conjunto paraguayo ganó la ida 2-0 en Asunción, con goles de Bobadilla y Sanabria, dejando todo a su favor. Sin embargo, en la vuelta disputada en Bogotá -y no en Medellín por decisión de CONMEBOL-, Nacional igualó la serie. Un autogol de Fidel Miño y un tanto de Albeiro ‘Palomo’ Usuriaga llevaron el global al 2-2. Tras un alargue sin goles, todo se definió en una infartante tanda de penales.
Ese desenlace fue épico: 18 disparos fueron necesarios para romper la paridad, en una de las series más largas del torneo. Allí emergió la figura de René Higuita, que atajó varios penales y se convirtió en héroe. Finalmente, y con el fallo de Vidal Sanabria, Leonel Álvarez selló el 5-4 definitivo. Atlético Nacional levantó su primera Copa Libertadores y le regaló a Colombia su primer título continental.
La remontada ante un rival de peso como Olimpia, la tensión del alargue y la tanda interminable de penales convirtieron esta definición en una epopeya. El país entero contuvo la respiración ante un logro inédito. La imagen de Higuita celebrando con los brazos alzados quedó como un símbolo imborrable.
Este título rompió la racha de finales perdidas por clubes colombianos y consolidó a Nacional como emblema del balompié criollo. Además, varios de sus protagonistas como Escobar, Higuita o el ‘Palomo’ serían figuras clave en la selección nacional. Para Olimpia, la derrota fue un golpe duro, aunque al año siguiente obtendría revancha. La final del 89 sigue siendo una de las más emocionantes y simbólicas en la historia de la Libertadores.
4. Liga de Quito vs. Fluminense (2008) – La final más goleadora y silencio en Maracaná
La final de la Copa Libertadores 2008 entre Liga de Quito y Fluminense fue una de las más emocionantes y goleadoras de la historia del torneo. Ambos equipos llegaban por primera vez a esta instancia, garantizando un campeón inédito. En la ida, jugada en la altitud de Quito, LDU se impuso 4-2 con goles de Bieler, Guerrón, Campos y Urrutia, mientras que Conca y Thiago Neves descontaron para los brasileños.
En la vuelta, el legendario Maracaná fue testigo de una remontada épica. Bolaños adelantó a Liga al minuto 6, pero Thiago Neves respondió con un hat-trick (11’, 28’ y 56’) que igualó la serie 5-5 en el global. El único hat-trick hasta el momento en finales de Libertadores.
El alargue no modificó el marcador y todo se definió por penales. Allí emergió la figura del veterano arquero José Francisco Cevallos, quien detuvo tres lanzamientos y se convirtió en héroe de la noche. Liga convirtió tres de sus cuatro penales y venció 3-1 en la tanda, consagrándose campeón por primera vez y dando a Ecuador su primera Copa Libertadores.
Esta final fue épica por su carga emocional, con 10 goles en 180 minutos, y el escenario, el mítico Maracaná. La actuación de Thiago Neves y la resistencia de Liga ante la presión brasileña marcaron un duelo inolvidable. Cevallos coronó la gesta silenciando a más de 80.000 hinchas locales.
A lo largo de los años, la Copa Libertadores ha dejado momentos inolvidables y protagonistas que marcaron época. Entre esos recuerdos también destaca la presencia de futbolistas de distintos países que han dejado su huella en el torneo, incluidos los jugadores panameños que participan en la Copa Libertadores, quienes representan una parte del crecimiento del fútbol regional en esta competencia legendaria.
5. Flamengo vs. River Plate (2019) – Remontada Agónica en la Final Única
La final de la Copa Libertadores 2019 entre Flamengo y River Plate fue histórica por múltiples razones. Disputada en el Estadio Monumental de Lima, fue la primera vez que el título se definía a partido único en sede neutral. River, campeón defensor tras la hazaña de Madrid ante su gran rival Boca, se adelantó temprano con un gol de Rafael Santos Borré a los 14 minutos y mantuvo el control durante casi todo el encuentro.
Flamengo, dirigido por Jorge Jesus y con figuras como Gabigol, Bruno Henrique y De Arrascaeta, no lograba romper el cerco argentino. Pero en el minuto 89, todo cambió: un pase de De Arrascaeta encontró a Gabigol para el empate, y apenas tres minutos después, el propio delantero brasileño aprovechó un error defensivo de Pinola para firmar el 2-1 definitivo. En cuestión de minutos, Flamengo pasó del abismo a la gloria.
Gabigol, autor de los dos goles en el tramo final, fue la gran figura, aunque también fue expulsado tras el pitazo por celebrar de forma provocadora. Nada opacó su heroísmo en una remontada que pasó a las grandes actuaciones de las finales de la Libertadores.
Con este triunfo, Flamengo logró su segundo título continental tras 38 años (el tercero llegará tres años después) y comenzó una nueva era dorada. Para River, la derrota fue dolorosa, aunque ratificó el alto nivel competitivo del ciclo de Gallardo. Esta edición de la Libertadores también validó el formato de final única: más de 70.000 aficionados y una audiencia global presenciaron un drama futbolístico digno de leyenda.